En el artículo de hoy te presento las 7 plagas más comunes en tu huerto urbano, te contaré sus características, daños y cómo combatirlas de forma ecológica. Un huerto urbano es un espacio de alegría y conexión con la naturaleza, pero también puede ser un campo de batalla contra pequeñas criaturas que buscan alimentarse.
Ya que conocer a los enemigos es el primer paso para proteger nuestras preciadas plantas vamos a enumerar tanto los problemas como las soluciones. La paciencia y la observación son claves en la lucha contra las plagas, también la mejor defensa es tener un huerto urbano sano y equilibrado.
Índice
1. Pulgones
Los molestos pulgones son, sin duda, una de las 7 plagas más comunes en tu huerto urbano, su capacidad para reproducirse rápidamente y su voracidad los convierten en una amenaza constante.
Identificación
Los pulgones son insectos diminutos, de cuerpo blando, que pueden variar en color (verde, negro, amarillo, blanco, etc.). Se agrupan en colonias, generalmente en los brotes tiernos y en el envés de las hojas y tallos. A menudo, su presencia se acompaña de hormigas, que se alimentan de la melaza que excretan los pulgones.
Daños
Al alimentarse, los pulgones chupan la savia de las plantas, debilitándolas y frenando su crecimiento. Provocan deformaciones en hojas y brotes, enrollándolos o arrugándolos además de transmitir virus y enfermedades a las plantas. La melaza que excretan favorece el crecimiento de hongos, como la negrilla y merman la producción de los cultivos, atacando directamente a los frutos.
Factores que favorecen su aparición
Exceso de nitrógeno en el suelo, la falta de biodiversidad en el huerto, condiciones de sequedad y calor, y el monocultivo, ya que al tener siempre la misma planta, se propaga con mayor rapidez.
Control ecológico
Prevención
Controlaremos esta plaga si fomentamos la biodiversidad, plantaremos flores y hierbas aromáticas que atraigan a insectos beneficiosos, como mariquitas, crisopas y sírfidos, que son depredadores naturales de los pulgones. Haremos la rotación de cultivos evitando plantar la misma familia de plantas en el mismo lugar.
Regaremos de forma adecuada, manteniendo el suelo húmedo, pero no encharcado, y aplicaremos una fertilización equilibrada evitando el exceso de nitrógeno. También revisaremos las plantas con frecuencia para detectar la presencia de pulgones a tiempo para que no se conviertan en plaga.
Tratamientos
El agua a cierta presión puede desalojar a los pulgones de las plantas. También podemos usar jabón potásico diluido en en agua pulverizada en las plantas afectadas. El aceite de neem es un insecticida natural que actúa como repelente y también afecta el sistema hormonal de los pulgones.
Podemos introducir depredadores naturales, nuestros grandes aliados en el huerto como mariquitas o crisopas por ejemplo. En este caso podemos usar trampas cromáticas amarillas, estas atraen a los pulgones y los atrapan y como remedios caseros podemos usar infusión con ajo, cebolla u ortiga.
2. Hormigas
Aunque las hormigas pueden parecer inofensivas, su presencia en un huerto urbano puede generar diversos problemas. Veamos porqué es una de las plagas más comunes en tu huerto urbano y sufrirla puede ser un verdadero dolor de cabeza ya una vez instaladas es difícil librarse de ellas.
Daños
- Protección de plagas chupadoras: Las hormigas tienen una relación simbiótica con pulgones, cochinillas y otras plagas chupadoras. Las hormigas se alimentan de la melaza que excretan estos insectos, y a cambio, los protegen de depredadores. Esto permite que las poblaciones de plagas chupadoras crezcan descontroladamente, causando daños significativos a las plantas.
- Daños a las raíces: Algunas especies de hormigas pueden dañar las raíces de las plantas al construir sus nidos cerca o debajo de ellas. Esto puede afectar la absorción de agua y nutrientes.
- Traslado de semillas: Las hormigas pueden trasladar semillas de hierbas que no nos interesan a diferentes partes del huerto contribuyendo a su propagación.
Factores que favorecen su proliferación
La abundancia de pulgones, cochinillas y otras plagas chupadoras proporciona a las hormigas una fuente de alimento constante y los restos de comida también. Prefieren ambientes secos y proporcionarlas refugios para sus hormigueros también será un factor que contribuirá a que no podamos evitar que su número crezca.
Control ecológico
Intentaremos en la medida de lo posible evitar que se alimenten controlando las plagas chupadoras y evitando dejar restos de comida en nuestro huerto urbano. Regaremos regularmente ya que no les gusta el agua. Podemos crear barreras físicas alrededor de las plantas con tierra de diatomeas, ceniza o posos de café.
Tratamientos
La tierra de diatomeas es un insecticida natural que deshidrata a las hormigas. También como remedios caseros tenemos el vinagre blanco, el zumo de limón y la canela que podemos usar rociando en sus caminos y hormigueros. Las plantas aromáticas como la menta, romero, orégano y tomillo las repelen.
3. Araña roja
Identificación
A pesar de su nombre, no es una araña, sino un ácaro, es de un tamaño diminuto, lo que dificulta su detección a simple vista y suele encontrarse en el envés de las hojas, donde teje telarañas finas. Su color varía, pero suele ser rojizo y se reproduce rápidamente, lo que puede llevar a infestaciones masivas.
Daños
- En las hojas: La araña roja se alimenta de la savia de las hojas, lo que provoca la aparición de pequeñas manchas amarillas o puntos decolorados. En ataques severos, las hojas pueden volverse completamente amarillas, secarse y caerse. También tejen telarañas finas en las hojas, lo que dificulta la fotosíntesis.
- Debilitamiento de las plantas: La pérdida de savia y la reducción de la fotosíntesis debilitan las plantas, haciéndolas más susceptibles a enfermedades y otras plagas. El crecimiento de las plantas se ralentiza y la producción de frutos disminuye ya que en algunos casos la araña roja puede atacarlos causando manchas y deformaciones afectando la calidad y el sabor.
- Propagación rápida: La araña roja se reproduce rápidamente en condiciones cálidas y secas, lo que puede llevar a un gran problema en poco tiempo. Se propaga fácilmente a través del viento, la ropa y las herramientas de jardinería.
Factores
La araña roja prospera en ambientes cálidos y secos, las altas temperaturas aceleran su ciclo de vida y la baja humedad relativa reduce la mortalidad de los huevos por eso durante los meses de verano, las poblaciones de araña roja aumentan. Los invernaderos proporcionan un ambiente ideal para su proliferación todo el año.
La falta de riego regular y la baja humedad ambiental favorecen la proliferación de la araña roja. El monocultivo o cultivo de una sola especie de planta proporciona a la araña roja una fuente de alimento abundante y constante, lo que facilita su propagación.
Como en cualquier plaga la ausencia de depredadores naturales como mariquitas y ácaros depredadores permite que las poblaciones de araña roja crezcan sin control. Un factor importante es el uso excesivo de pesticidas puede eliminar a los depredadores naturales de la araña roja, lo que favorece su proliferación.
El polvo en las hojas puede protegerla de depredadores y tratamientos con acaricidas. También el estrés en las plantas por falta de agua o nutrientes las hace más susceptibles a ser más atacadas por este ácaro.
Control
Ya que la araña roja prefiere ambientes secos debemos aumentar la humedad ambiental, esto ayudará a prevenir su aparición. Puedes pulverizar agua sobre las plantas o utilizar un humidificador. La biodiversidad de flores y aromáticas atraerán depredadores naturales que nos ayudarán a que no se instale.
Tratamientos
El agua a presión sería un buen ataque porque puede desalojar a las arañas rojas de nuestras plantas, como en otras plagas podemos usar jabón potásico y aceite de neem y también podremos usar remedios caseros como infusión de ajo y cebolla o de ortiga todos ellos con propiedades acaricidas.
4.Trips
Los trips son una plaga diminuta pero muy dañina que puede causar estragos en tu huerto urbano. Su pequeño tamaño y su capacidad para esconderse los hacen difíciles de detectar y controlar. Aquí te detallo los problemas que pueden causar los trips y cómo combatirlos.
Identificación
Como ya he dicho son insectos muy pequeños, de 1-2 mm de longitud, lo que los hace difíciles de ver a simple vista, suelen ser de color amarillo, marrón o negro, tienen alas aunque no son buenos voladores y se encuentran principalmente en flores, brotes tiernos y el envés de las hojas.
Daños
Dañan las hojas ya que los trips se alimentan de su savia dejando pequeñas manchas plateadas o blanquecinas, las hojas pueden deformarse, o arrugarse. También encontraremos daños en los frutos causando manchas, deformaciones y cicatrices y en las flores lo que reduce la producción de frutos.
Producen el debilitamiento de las plantas haciéndolas más susceptibles a enfermedades y pueden transmitir virus al alimentarse de plantas enfermas y después de sanas.
Factores que favorecen la proliferación de trips
Proliferan en clima cálido y seco, las flores proporcionan alimento y refugio a los trips y las hierbas adventicias también les pueden servir de refugio. La ausencia de depredadores naturales como ácaros depredadores y chinches depredadoras permite que se conviertan en plaga.
Control ecológico
Mantén el huerto urbano limpio y libre de hierbas competidoras, fomenta la biodiversidad plantando flores y hierbas aromáticas que atraigan a depredadores, riega con regularidad para aumentar la humedad e inspecciona regularmente las plantas en busca de signos de infestación.
Tratamientos
Además de usar jabón potásico y aceite de neem para pulverizar las plantas afectadas como en las otras plagas que hemos visto podemos usar trampas cromáticas azules e infusiones naturales con propiedades insecticidas como las ya mencionadas de ajo, cebolla u ortiga.
5. Mosca blanca
Identificación
Es fácil de identificar porque aunque son insectos muy pequeños, de 1-2 mm de longitud, lo que los hace difíciles de ver a simple vista, ya que son como puntitos blancos, en cuanto mueves la planta se las ve revolotear. Se encuentran en el envés de las hojas, donde depositan sus huevos y se alimentan.
Daños
La mosca blanca se alimenta de la savia de las plantas, lo que debilita su crecimiento y reduce su capacidad para producir frutos. Las hojas afectadas pueden volverse amarillas, marchitarse y caer. La melaza que excretan las moscas blancas favorece el crecimiento de hongos como la negrilla, que cubre las hojas con una capa negra y pegajosa dificultando la fotosíntesis.
La mosca blanca es un vector de numerosos virus lo que significa que puede transmitir enfermedades de una planta a otra. Estos virus pueden causar daños graves, incluyendo deformaciones, manchas y reducción de la producción. Además su presencia y la melaza que producen hacen que se vean sucias y poco saludables.
Factores que la favorecen
La mosca blanca prefiere ambiente cálido y seco, y si nuestras plantas están estresadas por falta de agua o nutrientes también son más susceptibles a los ataques de mosca blanca. La hierbas competidoras les sirven de refugio y como dijimos anteriormente con otras plagas si no hay depredadores naturales como mariquitas por ejemplo esta plaga se hará con nuestro huerto urbano.
Control
Fomenta la biodiversidad plantando flores y hierbas aromáticas que atraigan a depredadores naturales. Riega las plantas con regularidad para mantenerlas sanas y vigorosas. Inspecciona regularmente las plantas en busca de signos de presencia de mosca blanca, así la controlaremos enseguida.
Tratamientos
En este caso puedes colocar trampas cromáticas amarillas, estas atraen a las moscas blancas y las atrapan con pegamento. También podemos usar jabón potásico diluido en agua, aceite de neem e infusiones de ajo, cebolla u ortiga, para la mosca blanca también funcionan.
Consejos
Actúa rápidamente y sé constante, aplica los tratamientos ecológicos de forma regular, especialmente en condiciones cálidas y secas. Presta atención a las plantas y a los depredadores naturales que visitan tu huerto y aísla las plantas muy afectadas para que no pase la infestación a las sanas. Evita el uso de insecticidas químicos, ya que eliminan a los depredadores naturales.
6. Minador
Los minadores son larvas de insectos, generalmente moscas o polillas, que excavan túneles dentro de las hojas de las plantas, alimentándose del tejido vegetal causando serios daños en tu huerto urbano.
Identificación
El minador son larvas pequeñas de moscas, polillas, escarabajos u otros insectos, de 1-2 mm de longitud, que viven dentro de las hojas. Son difíciles de ver, lo que sí que es fácil de observar son los túneles o galerías que excavan en la superficie de las hojas dejando unos dibujos muy característicos.
Daños
Estas larvas dañan las hojas al hacer túneles o galerías que excavan en ellas, las hojas afectadas pueden deformarse, secarse y terminar por caerse, reduciendo la capacidad de fotosíntesis de la planta, esto hará que sean más débiles y susceptibles a enfermedades y otras plagas.
Además su crecimiento se verá ralentizado y la producción de frutos también disminuirá. En algunos casos, los minadores pueden actuar como vectores de enfermedades, transmitiendo patógenos de una planta a otra.
Factores que los favorecen
Crecerán sin control en un clima cálido y seco y se refugiarán en las hierbas competidoras. El monocultivo también hacen que proliferen en general todas las plagas además de hacerse resistentes y la ausencia de depredadores naturales como avispas parasitoides, esto siempre es un factor que favorece plagas.
Control
Mantén el huerto limpio y libre de hierbas que no nos interesan. Fomenta la biodiversidad plantando flores y hierbas aromáticas que atraigan a depredadores naturales. Inspecciona regularmente las plantas en busca de galerías y haz rotación de cultivos.
Tratamientos
Retira y destruye las hojas que presenten túneles de minadores. Pon trampas cromáticas amarillas, estas atraen a los adultos de los minadores y los atrapan con pegamento. El aceite de neem también puede ayudar a repeler a los minadores adultos y a controlar las larvas.
7. Caracoles y babosas
Los caracoles y las babosas son moluscos que pueden convertirse en una verdadera pesadilla para los cultivadores urbanos. Su apetito voraz y su capacidad para reproducción los convierten en una plaga difícil de controlar, pero también gracias a que en este caso se ven muy bien es más fácil que los controlemos.
Daños
Ya que se alimentan de hojas, tallos, flores y frutos nos dejarán agujeros irregulares y mordeduras. Atacan especialmente a las plantas jóvenes y a los brotes tiernos, pudiendo llegar a acabar con ellos. Pueden actuar como vectores de enfermedades, transmitiendo patógenos de una planta a otra y también pueden dañar los frutos, especialmente los que están en contacto con el suelo, dejándolos inservibles.
Factores que favorecen su proliferación
Humedad excesiva es el factor más importante ya que favorecemos que críen. Las hierbas competidoras proporcionan refugio y alimento. También la falta de depredadores como pájaros y otros pequeños animales que no creo que tengamos en nuestro huerto urbano.
Control ecológico
Mantén el huerto limpio y libre de restos vegetales y hierbas adventicias. Riega el huerto por la mañana, para que el suelo se seque durante el día y no campen a sus anchas. Crea barreras físicas alrededor de las plantas, utilizando materiales como ceniza, posos de café o cáscaras de huevo trituradas.
Trampas
Coloca trampas de cerveza, entierra recipientes con cerveza cerca de las plantas. Los caracoles y las babosas son atraídos por la cerveza y caen dentro del recipiente. También puedes poner refugios trampa como trozos de madera, tejas o piedras para que los caracoles y las babosas se refugien debajo y te sea más fácil su captura. Aprovecha a hacerlo durante la noche o en días lluviosos.
Remedios caseros
Esparce ceniza o posos de café o tierra de diatomeas alrededor de las plantas. Las hierbas aromáticas como romero, lavanda o tomillo, que repelen a los caracoles y las babosas. Crea un entorno hostil, no les gusta arrastrarse sobre superficies afiladas por lo que la gravilla o las cáscaras de huevo trituradas son perfectas.
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